Un muerto y un herido es el trágico balance del espectacular accidente de tráfico que ayer por la mañana se registró en la autovía A-91, a la altura de la Venta de la Petra, en la diputación lorquina de Zarzalico, tras el choque de dos camiones, uno de los cuales era una cisterna cargada de gas natural que finalmente explosionó.

La fuerte onda expansiva desplazó parte de los restos del camión a cientos de metros de distancia, alcanzando también a una estación de servicio próxima al lugar del accidente.

El siniestro se registró pasadas las 8 de la mañana. A esa hora, junto a la cuneta de la autovía en dirección a Vélez Rubio desde Puerto Lumbreras, se encontraba averiado un camión cargado con placas de cemento. El conductor de dicho vehículo, Óscar Martínez, manifestó que desde la calzada vio como el camión cisterna, que circulaba a unos 60 kilómetros por hora, se aproximaba a él sin desviarse hasta impactar con el vehículo averiado, yendo a estrellarse contra un terraplén. Fue entonces cuando empezó a salir gas de la cisterna por espacio de una hora hasta que explosionó. La explosión pudo verse y oírse a varios kilómetros de distancia.

El fallecido fue el conductor del camión cisterna, perteneciente a una empresa de Lérida, que murió calcinado en el incendio del vehículo, permaneciendo consciente y pidiendo auxilio hasta el fatal desenlace. El conductor del vehículo averiado intentó desesperadamente ayudarle, pero fue imposible dado el gran amasijo de hierros en el que se encontraba envuelto. Posteriormente tuvo que ser atendido en el hospital fruto de una crisis de ansiedad y traumatismo en una pierna.

Una de las hipótesis que se barajan para explicar el accidente es que el conductor de la cisterna se hubiese dormido al volante.

Cuando explosionó el camión se encontraban en los alrededores del lugar bomberos del Consorcio de Extinción de Incendios de Lorca con su responsable, Francisco Martínez Semitier, al frente. Semitier señaló que «nos hemos escapado de milagro, porque hacía unos segundos que habíamos abandonado el lugar de la explosión». Al lugar acudieron los servicios de emergencia de los ayuntamientos de Lorca y Puerto Lumbreras, así como la Guardia Civil de Tráfico, que puso en marcha un amplio despliegue para cortar las vías de acceso a la autovía durante varias horas.

El accidente se produjo a 300 metros de la estación de servicio Venta de la Petra, que sufrió diversos daños materiales. La explosión provocó asimismo el incendio de matorrales junto a la autovía. El fuego pudo ser controlado y extinguido rápidamente.

Sobre las 11 horas, los servicios funerarios extraían del amasijo de hierros los restos calcinados del conductor de la cisterna.

A las 13.45 horas fue desactivado el operativo de Protección Civil. Mientras, los servicios de conservación de carreteras del Estado, ayudados de una grúa, procedieron a la limpieza de la calzada y retiraron los restos del camión cisterna, que quedó reducido a cenizas y trozos de chapa.