Las Cortes Generales aprobaron ayer, día 13 de junio, la Ley de Prevención y Control Integrados de la Contaminación (IPPC), mediante la cual se pretende "prevenir, evitar, reducir y controlar la contaminación de la atmósfera, agua y suelo". Mediante esta ley se traspone al ordenamiento jurídico nacional la Directiva 96/91/CE y se incorporan los principios básicos de la Directiva 1999/13/CE de compuestos orgánicos volátiles.
El objetivo de la ley es proteger el medio ambiente y evitar que el control por separado de las emisiones favorezca que la contaminación se transfiera de un medio a otro y conseguir la mejora de la calidad del medio ambiente.
Con ello se busca integrar los criterios y variables medioambientales en el sector industrial para contribuir a la lucha contra el cambio climático, la lluvia ácida y la contaminación de mares y ríos, entre otros fenómenos.
La ley contempla la creación de la autorización ambiental integrada, que coordinará los controles y permisos ambientales existentes hasta la actualidad. Se crea así una única ventanilla ambiental, con la cual se eliminarán los numerosos trámites existentes hasta la actualidad.
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