El funcionario precisó que los bomberos comenzaron a apagar el fuego en la fábrica textil, mientras que en el almacén químico contiguo las labores se realizaban de manera defensiva para evitar más víctimas.
La causa del incendio todavía no se ha determinado, aunque inicialmente se sospecha que podría estar relacionada con una reacción química en el almacén.
Asimismo, el funcionario señaló que no está claro si los edificios afectados, tanto la fábrica textil como el almacén químico, cumplían con las regulaciones de seguridad contra incendios, y que el departamento de bomberos no había otorgado un permiso formal para su funcionamiento, aunque podrían contar con otra autorización.
«En estos momentos, todavía se observan llamas y humo en el almacén químico, donde un equipo de 15 a 16 bomberos continúa trabajando para controlar el fuego», concluyó el funcionario.
El jefe del Gobierno interino de Bangladés, Muhammad Yunus, expresó en su perfil de Facebook el pésame a las víctimas y señaló que la muerte de personas inocentes en el accidente es «profundamente dolorosa y desgarradora».
Yunus también deseó una pronta recuperación a los heridos y pidió a las autoridades competentes investigar las causas del siniestro y garantizar toda la asistencia necesaria a las víctimas.