La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) en Almería ha presentado una denuncia ante la Inspección de Trabajo por «omisión de información en prevención de riesgos laborales» contra la Comandancia de la Guardia Civil de la provincia por la, a su juicio, «gestión deficiente y peligrosa del traslado de las denominadas petacas de combustible incautadas en las costas de la provincia».

Según han trasladado desde este colectivo en un comunicado, se ha convertido en «una práctica habitual» el transporte de estos depósitos en vehículos no homologados para el traslado de mercancías peligrosas, esto es, sin certificación ADR ni medidas de seguridad. «Esta situación expone a los guardias civiles, que carecen de medios, a graves riesgos para su salud y seguridad, debido a la inhalación de gases tóxicos y al constante peligro de vuelco durante el traslado», detalla la AUGC.

Además, denuncia que los agentes intervinientes «no reciben formación ni información adecuada sobre los riesgos a los que se enfrentan». Es más, asegura la agrupación que «la única medida adoptada por la Comandancia ha sido calificar el riesgo como moderado, lo que no cumple con lo estipulado en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales».

También ponen en entredicho el modo en que se custodian estos materiales. Describe el colectivo de guardias civiles que las petacas que se interceptan, «que pueden llegar a ser centenares», se almacenan inicialmente en «depósitos provisionales, algunos de ellos en instalaciones municipales sin registro, hasta que una empresa concesionaria ubicada en Córdoba acude a retirarlas para su destrucción». Para la AUGC, «esta situación genera una acumulación peligrosa de residuos inflamables, sin control ni condiciones adecuadas de almacenamiento».

Ante esta situación, según indica el colectivo, tanto la Junta Directiva Nacional de AUGC como su delegación almeriense han realizado diversas peticiones internas, tanto a la propia Comandancia como al Consejo de la Guardia Civil, solicitando la implementación de protocolos de seguridad adecuados. Sin embargo, lamenta que, hasta la fecha, dichas solicitudes han sido ignoradas.

La AUGC considera que la provincia de Almería se está convirtiendo en el «basurero del narcotráfico», al tiempo que critica la falta de una legislación específica que regule adecuadamente el tratamiento y gestión de estos residuos. «No pararemos hasta lograr una auténtica prevención en materia de salud pública y laboral», concluye el comunicado de la organización profesional.