Más de 30 agentes de toda la provincia llegan al Levante para estar más preparados a la hora de enfrentarse a situaciones con sustancias inflamables

Más de 30 bomberos del Levante, Poniente y Almería capital participaron esta semana en un curso para profundizar en los conocimientos sobre la intervención en accidentes con materias peligrosas.

La organización del mismo la llevó a cabo Carlos Artero, Bombero del Levante almeriense, y en él se pudieron hacer visitas a empresas e instalaciones de gas natural y propano, así como de otras sustancias, además de contar con charlas de expertos en la materia, y de una sesión práctica para aplicar los conocimientos adquiridos en los cuatro días de formación.

Para Artero, así como para el resto de participantes en la iniciativa, es muy importante profundizar en este tipo de intervenciones ya que resultan de las más peligrosas si no se está bien preparado y se conocen bien todas las características del material y las herramientas a emplear.

«Es la primera vez que se hace un curso así tan especializado, cuando se han hecho han sido pocos y muy generalistas y teniendo en cuenta que hay más de 3000 mercancías peligrosas, pues al final quedaba todo un poco 'disperso'. Nuestra idea ha sido centrarnos en aquellas sustancias que estadísticamente son las que más circulan y son, así, más propensas a provocar un problema. Esas materias han sido gasoil, gasolina, butano y propano y gas natural. Son líquidos y gases inflamables, y es por ello que es muy importante cuando se da un aviso de accidente saber a qué nos enfrentamos. Por ejemplo, en la provincia hay mucho transporte por carretera y canalizado».

A la hora, por lo tanto, de dar un aviso de accidente hay que estar atento al panel que lleva el vehículo, si es mercancía peligrosa es de color naranja y lleva una indicación que debemos conocer para llegar con el material y el equipo necesario para la intervención, con el fin de evitar consecuencias mayores. «Ha habido alguna ocasión en que se ha pensado que se iba a un accidente 'normal' y resulta que llevaba un gas inflamable y el camión explotó. Nos podemos encontrar materiales corrosivos, gases tóxicos, que son muy peligrosos y es necesario tener mucho conocimiento para actuar adecuadamente», apuntó Artero.

El curso, además de charlas y ponencias, tuvo también visitas a empresas como Enagas y Repsol gas, donde los bomberos conocieron las instalaciones, el tipo de sustancias, los depósitos, accesos, entre otras cosas. «Es muy importante profundizar en todo esto porque, por ejemplo, si hay una fuga de gas licuado, en una empresa que tenga este tipo material, es necesario saber dónde hay que cortar, donde están las válvulas o a qué presión circula el líquido. Es la mejor forma de una rápida y adecuada actuación y de minimizar los peligros», corroboró el bombero.

Para finalizar el curso, los bomberos tuvieron ocasión de poner en práctica todo lo aprendido en el Parque de Bomberos de Turre, que dirige Paco Flores, y en el que se enfrentaron a un accidente de un camión cisterna con gasolina, en el que hicieron un trasvase del combustible con el fin de evitar males mayores, y también intervinieron de forma simulada en un escape de gas, que había generado lo que se llama dardos de llama, y que solo se puede extinguir cortando el paso de gas. Así, los bomberos con mangueras se fueron acercando al lugar echando agua para evitar la radiación hasta llegar a la válvula de corte y resolver el accidente.

A partir de aquí, la idea es poder seguir especializándose teniendo en cuenta las características de cada territorio provincial.